x
Visto en: https://habitissimo.cl
El lavaplatos suele ser otro de los focos de suciedad, ya que a veces los restos de comida se van quedando acumulados y poco a poco, la grasa se pega a la pila. Una de las rutinas que debemos incorporar es lavar tanto el lavaplatos como el grifo a diario: hazlo con un estropajo, agua caliente y jabón y hazlo a conciencia. Si notas que la grasa persiste, pon agua caliente y un chorro de vinagre (también amoniaco, aunque es más invasivo) y deja que la grasa se vaya diluyendo. A continuación, aclara con abundante agua.