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Visto en: archdaily
Cuidado acá. Si te comprometes a hacer una obra en un plazo determinado, es completamente normal que el cliente lo exija. Todos sabemos que siempre habrá imprevistos que ralenticen las remodelaciones. Si no quieres tener problema con el cliente (que evidentemente tendría razón), hay que ser inteligente y darse un tiempo de margen. Añade siempre unos cuantos días más, dependiendo de la “pega”. Si terminas antes, el cliente estará mucho más contento. Si hay algún problema, contarás con margen suficiente para solventarlo y acabar a tiempo.